Los altos precios del gas sitúan a la fábrica eléctrica como una alternativa para el azulejo, pero a futuro

El XVII Congreso Mundial de la Calidad del Azulejo y del Pavimento Cerámico -Qualicer 2022- cerró este martes sus puertas y lo hizo con una sesión destacada en la que se analizaron las ventajas y los inconvenientes que presenta la fábrica eléctrica como alternativa a los actuales hornos de gas dentro del proceso de descarbonización que obliga a este sector a transformarse con vistas a cumplir con las exigencias medioambientales que regula la establece la normativa europea.

 

En este contexto, la fábrica cien por cien eléctrica presenta tantas ventajas como inconvenientes, pero se trata de un sistema que, con el actual encarecimiento de los precios del gas, ha ganado un notable protagonismo y más cuando la previsiones a futuro hablan de un gas cuyo coste permanecerá muy alto a lo largo de los próximos años.

 

La sesión que cerraba esta edición de Qualicer, que moderó Gustavo Mallol, director del ITC-AICE,  reunió en una mesa al CEO de Kerajet, José Vicente Tomás, empresa radicada en el término de Almassora y que ya dispone de la primera planta piloto 100% eléctrica; junto a él estuvo Javier Rodríguez-Mingote, director de Operaciones de Levantina Group, que desde 2006 ya opera con hornos eléctricos; junto a ellos estuvieron el director comercial de la Región Este de Iberdrola en la Comunitat Valenciana, Joaquín Longares; y Empar Martínez, secretaria autonómica de Economía.

 

José Vicente Tomás abrió el turno de intervención analizando su proyecto Helioker, una ambiciosa propuesta para hacer de la electricidad procedente de renovables la única fuente de energía de una planta cerámica completa. Tomás recordó que Helioker nació hace cinco años y su objetivo ha sido lograr piezas cerámicas cocidas con la mejor eficiencia posible y hacerlo con electricidad. Entre las ventajas de esta fuente de energía, señaló, está un mayor control del proceso, es limpia puesto que no hay combustión y, con ello, no hay emisiones, apenas un 5%, por lo que entiende que «la eléctrica es la solución ideal» para el sector en su camino hacia la descarbonización total.

 

Además, según señala el CEO de Kerajet, firma española que tiene distribuidas 3.900 máquinas de impresión digital por todo el mundo y delegaciones por varios países, «con los actuales precios del gas se favorece la implantación de las plantas eléctricas». José Vicente Tomás, remarcó que la planta piloto de Helioker ofrece máxima eficiencia y «es una solución muy interesante. Y con los precios actuales del gas, aún más», esgrimió.

 

El director de Operaciones de Levantina Group, describió por su parte cómo su compañía viene trabajando con la electricidad en los procesos. Como principales ventajas, Javier Rodríguez-Mingote incidió en que no presenta huella de carbono y que es eficiente, ya que la atmósfera dentro del horno está más controlada y no contamina. Entre los inconvenientes, explicó, están los precios -que son más caros que el gas- además de los problemas de mantenimiento que presenta una tecnología que carece de nuevos desarrollos.

 

En cuanto al papel de la Administración a la hora de acelerar los procesos y las correspondientes autorizaciones y ayudas, Empar Martínez, destacó la apuesta que existe para fomentar el autoconsumo y las renovables en su conjunto, para lo que existe un plan que ha permitido a la Generalitat Valenciana doblar los recursos humanos y plantear un modelo de ventanilla única.

 

Por parte de Iberdrola, Joaquín Longares explicó en su intervención que hay suficiente capacidad de producción y distribución, teniendo en cuenta -como recordó Gustavo Mallol- que una electrificación del sector supondría multiplicar por diez la demanda de esta energía.

 

Inversiones para reforzar la red de Iberdrola

Longares explicó que la capacidad de producción en España es alta. Así, solo en 2021 en España se instalaron de 7.000 a 8.000 MW de energía solar. «No va a faltar energía» y más, dijo, cuando se toman en cuenta que en cartera Iberdrola tiene previsto alcanzar los 16.000 MW. «El principal hándicap es que se trata de un proceso progresivo. Y además, habrá que ir pensando en subir tensión, la ubicación de las líneas eléctricas… Hay que buscar ubicaciones más idóneas… permisos, proyectos, legalizarlos y ejecutarlos. Es un proceso que lleva años», detalló.

 

En este contexto, el responsable comercial de Iberdrola para la Comunitat y Murcia, manifestó que los distribuidores han tenido que adaptarse a la demanda y hacerlo con fuertes inversiones. Así, Iberdrola prevé invertir para el trienio 2022-2025 un total de 477 millones de euros para reforzar la red.

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