ITC e Ivace+i dan un nuevo paso para implantar el hidrógeno verde en la industria cerámica
El Instituto de Tecnología Cerámica (ITC) ha abierto una nueva línea de investigación para avanzar en el proceso de descarbonización del sector cerámico. Se trata de un nuevo proyecto para impulsar el uso del hidrógeno verde en la industria mediante un proyecto que persigue analizar el efecto que tiene en el producto final y lograr así que la calidad sea idéntica a la actual utilizando energía sostenible. Una iniciativa que cuenta con el apoyo del Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (Ivace+i).
Según han explicado desde el ITC, se trata de una nueva línea que se suma a otros proyectos ya en marcha para reducir las emisiones en la industria de baldosas cerámicas. De esta manera, ITC y la entidad del Consell que preside Nuria Montes dan un nuevo paso en el camino para poder implantar el hidrógeno verde en la industria cerámica.
El secretario autonómico de Industria, Comercio y Consumo de la Generalitat, Felipe Carrasco; el director general de Industria, Manuel Rosalén; y el director general de Energía y Minas, Manuel Argüelles, han visitado este martes las instalaciones del Instituto del ITC en Almassora para conocer de primera mano esta y otras líneas de investigación en las que está trabajando el centro tecnológico.
Salto cualitativo
Tal y como han explicado desde ambos institutos, la nueva línea «permitirá dar un salto cualitativo en las investigaciones que ha venido realizando el centro tecnológico con el apoyo del Ivace+i para impulsar la descarbonización del sector. En concreto, la nueva investigación liderada por el ITC prevé impulsar el uso del hidrógeno verde e la etapa de cocción, donde se consume más del 60% de la energía en los procesos de fabricación de piezas cerámicas.
En este camino hacia la descarbonización del sector, el ITC logró un hito importante en 2022, cuando consiguió por primera vez la combustión mediante hidrógeno en un horno cerámico. Ahora, la nueva línea busca experimentar y medir a escala de laboratorio cómo se comporta esta energía sostenible en el proceso de fabricación de baldosas.
El proyecto, que se prevé que esté liderado por el catedrático de la Universitat Jaume I Eliseo Montort, se llevará a cabo en la planta piloto hipocarbónica del ITC y estudiará cómo aplicar el hidrógeno verde en los procesos de fabricación de piezas cerámicas y analizar si su uso afecta de algún modo a las características del producto final.
Así, desde el instituto tecnológico explican que, cuando se cambia algún factor en el proceso, como en este caso el uso del gas por el hidrógeno verde, puede haber efectos sobre el producto final. Con esta nueva línea se analizará y medirá estos posibles efectos del hidrógeno verde para conseguir que el producto final tenga la calidad actual. En un primer momento se realizarán pruebas con una mezcla de hidrógeno (70%) y gas natural (30%) hasta alcanzar el 100% de energía verde.
Además, según han informado, «el ITC se plantea el uso de tecnologías disruptivas como son los combustibles alternativos, la captura y almacenamiento de CO2 y la electrificación de procesos con energía generada por fuentes renovables». El objetivo inicial planteado por el ITC es poder obtener de sus propias placas fotovoltaicas la electricidad necesaria para generar el hidrógeno verde, con lo que la electricidad utilizada será 100% renovable.
Para el secretario autonómico de Industria, Comercio y Consumo, Felipe Carrasco, “esta investigación es ambiciosa, defiende los intereses de las empresas del sector y aúna conocimiento científico (Universidad), tecnológico (ITC) y a las empresas». «Esta colaboración está demostrando ser clave para impulsar la innovación industrial y social», ha indicado.
Línea de ayudas de dos millones
Tal y como han explicado desde ambos institutos, la nueva línea «permitirá dar un salto cualitativo en las investigaciones que ha venido realizando el centro tecnológico con el apoyo del Ivace+i para impulsar la descarbonización del sector. En concreto, la nueva investigación liderada por el ITC prevé impulsar el uso del hidrógeno verde e la etapa de cocción, donde se consume más del 60% de la energía en los procesos de fabricación de piezas cerámicas.
En este camino hacia la descarbonización del sector, el ITC logró un hito importante en 2022, cuando consiguió por primera vez la combustión mediante hidrógeno en un horno cerámico. Ahora, la nueva línea busca experimentar y medir a escala de laboratorio cómo se comporta esta energía sostenible en el proceso de fabricación de baldosas.
El proyecto, que se prevé que esté liderado por el catedrático de la Universitat Jaume I Eliseo Montort, se llevará a cabo en la planta piloto hipocarbónica del ITC y estudiará cómo aplicar el hidrógeno verde en los procesos de fabricación de piezas cerámicas y analizar si su uso afecta de algún modo a las características del producto final.
Así, desde el instituto tecnológico explican que, cuando se cambia algún factor en el proceso, como en este caso el uso del gas por el hidrógeno verde, puede haber efectos sobre el producto final. Con esta nueva línea se analizará y medirá estos posibles efectos del hidrógeno verde para conseguir que el producto final tenga la calidad actual. En un primer momento se realizarán pruebas con una mezcla de hidrógeno (70%) y gas natural (30%) hasta alcanzar el 100% de energía verde.
Además, según han informado, «el ITC se plantea el uso de tecnologías disruptivas como son los combustibles alternativos, la captura y almacenamiento de CO2 y la electrificación de procesos con energía generada por fuentes renovables». El objetivo inicial planteado por el ITC es poder obtener de sus propias placas fotovoltaicas la electricidad necesaria para generar el hidrógeno verde, con lo que la electricidad utilizada será 100% renovable.
Para el secretario autonómico de Industria, Comercio y Consumo, Felipe Carrasco, “esta investigación es ambiciosa, defiende los intereses de las empresas del sector y aúna conocimiento científico (Universidad), tecnológico (ITC) y a las empresas». «Esta colaboración está demostrando ser clave para impulsar la innovación industrial y social», ha indicado.