Asebec y las firmas de maquinaria cerámica potencian la digitalización 4.0
La Asociación Española de Fabricantes de Maquinaria Cerámica (Asebec) ha presentado hoy la Guía Asebec 4.0, un instrumento clave para avanzar hacia la adopción de la estrategia 4.0 por parte de las empresas de maquinaria cerámica y que ayuda a todo el sector a acelerar la transición del proceso tradicional, a la digitalización en todo el sector cerámico.
En el acto ha intervenido el Conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafael Climent, quien ha animado a este sector a seguir esforzándose para impulsar e implantar este cambio necesario, y por eso, desde la Conselleria de Economía, a través del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) cuya directora general Júlia Company, también ha estado presente, no han escatimado esfuerzos para apoyar este salto que, si antes era necesario, actualmente es imprescindible.
“Esta Guía es un instrumento único y de alcance mundial, ha manifestado el Conseller, “dado que las empresas de maquinaria tienen clientes tanto en España como en países del Norte de África, Latinoamérica, Turquía o la India, entre otros”.
Juan Vicente Bono, presidente de Asebec, ha resaltado la necesidad de que cuanto antes las empresas de maquinaria adopten esta Guía que resulta esencial para abordar este cambio, la digitalización, la interconexión, la aplicación de tecnologías de vanguardia como el Internet de las Cosas, la Inteligencia Artificial o el Gemelo Digital, que ya están desarrolladas, es ya un imperativo y más en las circunstancias en las que nos vemos inmersos debidas a la irrupción de una pandemia global.
Así, la Guía ha contado con el apoyo del IVACE a través de los Fondos Europeos FEDER de Desarrollo Regional y en su elaboración ha participado el Instituto de Tecnología Cerámica junto a varias empresas asociadas a Asebec.
En el acto ha estado presente también la directora general de Internacionalización, Mª Dolores Parra, quien ha recibido al Conseller de Economía junto al presidente de ASEBEC, Juan Vicente Bono y el director de ITC/AICE, José Gustavo Mallol. También han asistido miembros de las directivas de Ascer y Anffecc, además de representantes de las once empresas asociadas a Asebec que han participado en la elaboración de esta Guía.
Juan Boix, responsable del Área de Procesos Industriales del ITC y coautor de la Guía Asebec 4.0, ha sido el encargado de explicar técnicamente en qué consiste este documento, que se podrá descargar desde la web: www.spanishceramictechnology.com y se está traduciendo al francés e inglés.
¿Qué es la Guía ASEBEC 4.0?
Es una herramienta desarrollada para ayudar a conocer mejor e implantar la denominada estrategia 4.0 en la toda la industria cerámica, no solo en sus procesos de fabricación, sino en toda su cadena de valor. La industria cerámica, a escala mundial, se enfrenta a uno de sus retos más importantes: digitalizarse, o morir.
Actualmente, las compañías manufactureras, especialmente en Europa y EEUU, deben hacer frente a mercados cada vez más competitivos. En un entorno globalizado y dinámico de una gran complejidad, la toma de decisiones debe realizarse de forma correcta y con la mayor rapidez posible para seguir manteniendo la competitividad a largo plazo. Desafortunadamente, la gestión actual de las operaciones de las compañías no consigue afrontar con éxito este reto, lo cual puede poner en riesgo, en algunos casos, el control de sus núcleos de negocio. Así, en muchas ocasiones la toma de decisiones puede suponer ralentizaciones de semanas o meses y las decisiones prácticamente siempre están basadas en sensaciones intuitivas, en lugar de en el análisis de información detallada.
La Guía describe con detalle tanto las problemáticas de origen como el planteamiento de las acciones necesarias.
La implantación de la industria 4.0 puede ayudar a la empresa a reducir de una forma drástica los tiempos que transcurren entre problemáticas planteadas porque puede desplegar una serie de tecnologías habilitadoras que ofrecen información relevante y accesible, eliminando lo que se llama “islas de información”.
Es decir, ofrece una serie de datos relevantes para producir más, mejor, con mayor calidad y en menor tiempo.
Eso sí, es necesario incorporar nuevos enfoques en la estructura y cultura organizativa de las compañías con el fin de estar preparadas para los continuos cambios asociados a la transformación.
Actualmente ya existen máquinas capaces de trabajar de forma autónoma que reportan en tiempo real información sobre su estado de funcionamiento. Esta información se puede procesar y prever fallos, averías o contratiempos que podemos anticipar, reduciendo los tiempos de respuesta y mejorando el rendimiento de las plantas de fabricación.