El momento de la Transformación Digital es ahora.
El término “Transformación Digital” es bastante reciente, sin embargo, lleva mucho tiempo aplicándose en los sectores industriales, ya que este término, en su significado más primigenio, hace referencia a la transición de procesos analógicos a otros digitales que faciliten el trabajo y mejoren los resultados
La digitalización supuso el cambio de las hojas Excel por los ERP, o los partes de producción por instrucciones de trabajo en otro ERP, o más recientemente la creación de catálogos de producto en soportes digitales o las mismas páginas web.
En qué consiste el proceso de transformación.
Dicho proceso de Transformación Digital implica la transformación de la estructura de la empresa para enfocarla totalmente a satisfacer las necesidades de los clientes. Esta abarca todas las áreas de la empresa e implica a todas las personas que forman parte de ella.
El proceso empieza desde cómo conectamos con nuestros clientes y termina cuando recibimos los pedidos y se desarrollan los productos, para posteriormente ser entregados, cerrando un círculo que hará ser más eficientes y aportar mucho más valor añadido.
Para poder realizar esta Transformación, primero es necesario entender cómo nos puede afectar dentro de la organización, y sobre todo, estar dispuestos a realizar cambios que afectarán tanto a las tareas del personal como a los procesos a ejecutar. Sin estos cambios, no será posible realizar esta Transformación Digital, que tiene dos partes fundamentales: las personas y la tecnología. Por un lado, las personas son las que tienen que promover el cambio mencionado, y por otro, el uso de las nuevas tecnologías que nos permitan hacer las cosas de manera diferente a como se han realizado hasta ahora.
La industria 4.0.
La Industria 4.0 es tendencia en el sector cerámico. Este concepto implica el uso de nuevas tecnologías, como Inteligencia Artificial, Big Data, Cloud Computing, iOT o Blockchain para mejorar los procesos en el área de fabricación. Dichas tecnologías serán simples facilitadoras, que integradas dentro de aplicaciones, monitorizarán lo que está ocurriendo y corregirán automáticamente las desviaciones que aparezcan en el proceso productivo, lo que nos ayudará a agilizar la toma de decisiones.
Muchos fabricantes de azulejo se han lanzado a realizar cambios en sus procesos industriales basándose en este concepto sin un objetivo establecido. Lo hacen para mejorar los procesos productivos, dejando de lado la digitalización del producto y el contacto con el cliente, sin entender primero sus necesidades para después satisfacerlas de la manera más eficaz posible, es decir, poner al cliente en el centro de nuestra organización. Solo así tendrá sentido abordar este cambio de paradigma en el que nos encontramos.
Situar al cliente en el centro, personalizando el producto cerámico.
Como ejemplo de esto, recientemente veíamos publicado un artículo donde una empresa del sector está consiguiendo fabricar un producto a medida para sus clientes, permitiendo desde la elección del diseño, hasta el acabado y color, reflejando así la posibilidad de personalización completa del producto cerámico.
Esto solo es posible mediante el uso de herramientas digitales que les ayuden a controlar perfectamente los procesos productivos para fabricar lo que el cliente quiere exactamente en el momento exacto y con unos costes controlados. Más eficaz imposible, y desde el punto de vista del cliente, puede tener el producto que quiere, y solo para él, maximizando el valor del producto que está comprando.
La transformación digital como única alternativa
Este cambio de paradigma es el que podemos conseguir a través de la transformación digital, y para ello, es necesario implantar las metodologías adecuadas en nuestras empresas, desde el canal de comercialización, hasta la fabricación y el servicio.
Alejandro Martín, Business Manager de Digt-s, empresa adherida a Asebec/Spanish Ceramic Technology, en un artículo para la plataforma de Inteligencia Competitiva para el sector cerámico, Vigilancer.