El presidente de Asebec, Juan Vicente Bono, asegura que la caída de la producción azulejera en España ha arrastrado también a los fabricantes de maquinaria y tecnología que ahora buscan en el extranjero y en otros sectores nuevas posibilidades de crecimiento. En cualquier caso, la transición no es fácil y Bono no duda en afirmar que ve el futuro de la industria «con incertidumbres».

–Actualmente, ¿cuál es el estado de salud del sector español fabricante de maquinaria para la industria cerámica?

-Somos la consecuencia de lo que hacen nuestros clientes, y la caída de actividad la arrastramos desde principios de año. Después del parón de Navidad, solo arrancó un 50% de la actividad azulejera española. En el primer semestre se ha registrado una caída de nuestras ventas en España de un 40% y, a pesar de no tener cifras absolutas y definitivas, todo apunta a que nuestra actividad exportadora se está manteniendo. No crece, pero al menos se mantiene gracias a que hay empresas grandes de moldes y de inkjet que sí que están creciendo. Pero el mercado nacional está completamente parado. No hay inversiones. Esos datos son de antes del verano, y todo apunta que los datos posteriores son todavía peor.

-¿El futuro está en el extranjero?

-Bueno, tampoco la situación es excesivamente boyante en muchos de nuestros mercados de exportación. La subida de los tipos de interés en gran parte de Iberoamérica está teniendo una influencia, lógicamente negativa. En Brasil ya se está parando la actividad inversora, aunque ese caso no nos afecta mucho porque nuestra presencia no es significativa, porque cuenta con una industria propia de fabricación de maquinaria, pero en México sí que estábamos entrando y ya estamos notando una desaceleración de las compras. En julio estuvimos haciendo una misión comercial en México y Guatemala y, en principio, muy bien. Volvimos contentos. Pero lo cierto es que ya están levantando el pie y frenando las inversiones. Por eso iremos haciendo los proyectos que ya tenemos encargados.

–¿Qué factores les afectan a las azulejeras de fuera de Europa?

-Todos nos dicen lo mismo. La industria azulejera de India está inundando muchos países de Europa del Este, así como América, tanto en lo que se refiere a Estados Unidos como a los mercados hispanos. Ofrecen un producto a precios muy competitivos que limita la actividad de las fábricas locales y, por lo tanto, las inversiones en maquinaria. Europa ya decretó medidas antidumping contra Turquía e India, pero el gravamen impuesto no les perjudica. Ahora habrá que ver cómo responden los demás países.

—¿Cuáles son los principales destinos internacionales de la maquinaria cerámica española?

-Además de México, otro mercado en el que también estamos vendiendo bastante es Colombia. Argelia, que fue uno de nuestros grandes consumidores hasta hace muy poco, es hoy en día un mercado muerto para nosotros,aunque sabemos que algunas empresas logran vender algo a través de filiales o colaboradores de Italia o Portugal… Otros mercados en los que también tenemos negocios es en Marruecos. Además, hay que destacar que los grandes grupos de inkjet, como es el caso de Kerajet y Cretaprint, venden a todo el mundo, pero también crecen gracias a una diversificación de los sectores con los que trabaja.

–¿Hacia qué sectores está diversificando la industria inkjet?

-Kerajet se está extendiendo también hacia temas de textil y vajillería e hizo una inversión importante con la compra de una fábrica de vidrio, y está ampliando sus instalaciones para coger también este mercado. Y Cretaprint está muy volcada en el tema del papel, el cartón y otros sectores, lo que les permite mantener sus líneas productivas y seguir creciendo. A nivel internacional, aumentan sus ventas, pero el mercado doméstico tampoco les funciona bien.